martes. 23.04.2024
El Tiempo
Es lo Cotidiano

Ojo de plástico

Flor Bosco

Ojo de plástico

Una muñeca, ahora pirata, me ha confiado a la niña de su ojo izquierdo; le tuve que ayudar un poco sosteniendo firmemente la navaja mientras rajaba su mejilla. No hay manera de apagar la vida de un ojo, aunque mera reproducción de plástico este logra, sólo por su forma, tener halo de vida y ejercer aún de observador espejeando la conciencia de los otros. Sin su par, potencia el oficio de severo juez, hasta tiembla y enrojece un poco cuando sostiene la mirada retadora. Mi pupilo azul, bordeado de tupidas pestañas, ahora es testigo de nuevos aconteceres que, bajo el rigor de la creencia, nada tienen de fantástico; parece haber estado desde siempre dando alma al objeto sobre el que reposa y haber tenido esa perspectiva del mundo que no se contradice mezclando sus vidas pasadas. Su presencia es inquietante pero aún más temible que la mirada singular es la cuenca original que quedó vacía.

(De Objetuario)